Siempre Scout

Siempre Scout
Jóvenes Caballeros del Imperio
Baden-Powell

Vereda recorrida: Home - Biblioteca - Indice

ALEGRÍA

Ley 8.

UN SCOUT SONRÍE Y SILBA EN TODAS LAS DIFICULTADES

Cuando se le da una orden, debe obedecerla alegremente y de buena gana, no lentamente como perro apaleado.

Los Scouts nunca protestan por los trabajos duros o se quejan unos de otros, ni maldicen cuando se les desconcierta, pero siguen sonriendo y silbando. Cuando pierden un tren o cuando les pisotean su maíz favorito, no que los Scouts tengan tal cosa como maíz, o en cualquier circunstancia desagradable, deben forzarse a sí mismos a sonreír de inmediato y después a silbar una tonada y así se Sentirán bien.

El castigo por jurar o usar malas palabras es, por cada ofensa, una taza de agua fría que le vaciarán por la manga al ofensor, cada uno de los otros Scouts. Es el castigo inventado por el viejo scout británico, Capitán John Smith, hace 300 años.

Cuando estuve acampando con mis Scouts en Humshaugh, Northumberland, un noble que vivía en los alrededores nos invitó a visitar su castillo. Era una hermosa y vieja torre que estaba muy conservada en el estado en el que tenía cuando formaba una de las defensas de frontera contra Escocia. En la parte superior estaba la plataforma de combate desde donde los arqueros disparaban sus arcos y flechas, y los artilleros disparaban sus culebrillas. En el piso de abajo estaban las habitaciones donde vivía la familia y más abajo de éstos estaban los cuarteles de los hombres de armas. En el piso a nivel del suelo estaban los establos donde llevaban para protección al ganado cuando el enemigo estaba cerca. Los rastrillos que cerraban la entrada existían todavía, eran elevados y bajados por medio de unas cuerdas con unas poleas cuyas palancas eran operadas desde un piso superior.

En tiempos subsecuentes más pacíficos, esto es, en el reinado de James I, se construyó una casa en la torre para dar más espacio a los habitantes.

En el vestíbulo de esta casa había una chimenea noble en la cual había un muy elaborado tablero de chimenea de roble tallado ilustrando las siete virtudes cristianas. Había pequeñas estatuas que representaban la Fortaleza, Benevolencia, Fe, etc., todas las buenas cualidades que un cristiano debe tener y poner en práctica. Pero yo sentí, después de verlas todas, que había una virtud que hacía falta y sugerí a los muchachos que se podían llevar a cabo todas estas siete buenas cualidades de un cristiano sin hacerlas con la mejor eficiencia. Pueden llevarla a cabo como una orden de ser generosos, serviciales, caballerosos y demás; pero si sólo lo hicieron por que era una orden y por lo tanto lo hicieron quejumbrosamente, la mitad de su valor se perdió.

El punto importante es que cuando saben cuál es la cosa correcta que deben hacer, deben apresurarse a hacerla alegremente y con una sonrisa. Por lo tanto pienso que nosotros los Scouts debemos agregar una más a estas siete virtudes cristianas, especialmente la alegría.

Entonces, habrá otra buena razón para estar felices.

¿Alguna vez han notado cuando caminan por las calles cuán pocas personas se ven realmente felices?. Seguido van con los ojos bajos, casi siempre con un semblante acongojado y serio; si alguien se dirige a ustedes con una sonrisa es un gran alivio y los hace sentir un poco más felices. Aquí hay otra buena razón por la que un Scout debe ir con una sonrisa, porque hace felices a otra personas.

No siempre se van a sentir alegres, pero no lo deben demostrar, pues ésto hará que otras personas se sientan malhumoradas también. Si ustedes hacen por verse alegres, gradualmente verán que se están volviendo más joviales.

Si están ansiosos, enfadados o con dolor, hagan el esfuerzo de sonreír. Al principio será difícil; aún así, hagan un esfuerzo por hacerlo y para su sorpresa verán que su disgusto no es tan grande como pensaban que era.

He sabido que hombres en acción se ponían muy ansiosos cuando un gran peligro los ensombrecía. Pero si uno empezaba a reír y a hablar alegremente o a silbar, la nube pasaba, todos veían a lo alto y estaban listos para afrontar la situación.

Esto es lo que hace a nuestros hombres tan formidables en la guerra justo ahora. A pesar de grandes pérdidas, a pesar de ataques abrumadores contra ellos, han mantenido en alto su espíritu y por lo tanto su ánimo. A menudo esto ha sido su secreto para sobreponerse y será su secreto de salir victoriosos al final.

Recuerden esto, yo he encontrado que es verdad en cientos de casos diferentes:

"Una dificultad deja de ser dificultad si se le sonríe directamente y se le ataca".

LA SONRISA DE UN SCOUT

Durante una de mis visitas a Birmingham, vi una reunión de Scouts locales. Una cosa que me impresionó de ellos, aparte de su buen trabajo, era su alegría. En la parte exterior de su programa tenía impreso el retrato de ocho de sus más brillantes Scouts y cada uno de ellos tenía una gran sonrisa.

Bueno, eso es lo que me gusta ver: compañeros que puedan trabajar, y trabajar contentos. Es justo lo que nuestros hombres están haciendo en el frente.

El otro día vi una carta de uno de los oficiales describiendo cómo los hombres viven una miserable existencia postrados en las trincheras, siempre fríos, mojados y enlodados, todo el tiempo les están disparado y bombardeando, pero daban la bienvenida a las bombas como si fueran amigos, dándoles apodos tales como Jack Johnson, Black Marías, Wolly Bears, etc. Él dice de ellos:

"Si me preguntaran qué me impactó más, debo decir que fue la maravillosa alegría de los hombres que vivían en tan horribles circunstancias. Cada uno de los hombres parecía feliz. Siempre están listos para hacer un chiste, ven diversión en cada cosa".

Es por esto, por lo que vamos a tener éxito en esta guerra, por que nuestros hombres ven el lado positivo de esto, toman las cosas con alegría y con esperanza, aun en las peores circunstancias. Es también la manera de tener éxito en tiempos de paz al hacer nuestro trabajo o sufriendo penalidades o desengaños.

LUCHANDO DESDE UNA SILLA

Un pequeño consejo que les di a los Scouts de Birmingham fue que, si alguna vez corren una carrera con un perro, mantengan sus ojos en el perro, y no vean alrededor a otras cosas. Yo mismo fui un ejemplo de "cómo no se debe hacerlo", pues mantuve una carrera con mi perro, iba corriendo con mis pantalones cortos, me vio mirar alrededor y repentinamente corrió entre mis piernas y me tiró. Así que tuve que ir a Birmingham con una rodilla vendada y con dos palos.


Pon tus ojos en el perro

Pero lo que es verdad en una carrera con un perro, es verdad en otras competencias en la vida. Al empezar a hacer una cosa, mantengan su atención fija en lo que están haciendo y no la dejen divagar a otras cosas, de otra manera podrían salir trasquilados mal.

Es una pequeña desventaja andar con una pierna fuera de acción inspeccionando Scouts, pero yo sólo estaba siguiendo el ejemplo de otros Scouts.

Tenemos a Bob Miller, un Scout de Whitby, quien, cuando perdió una pierna por una bomba alemana, era bastante feliz. Me escribió que él sentía que era un honor ser el primer Scout en ser herido estando en el deber y quería seguir siendo Scout, no obstante la pérdida de una pierna.

Otro Scout, quien perdió un ojo porque un tonto novato que jugaba con una pistola, escribió diciendo que él podía seguir siendo Scout tan bien con un ojo como con los dos. Éste es el espíritu de los Scouts.

Además de éstos tengo otro ejemplo, en el frente, una persona con el mismo nombre que el mío, Mayor H.G. Powell. Había dejado la armada hacía unos diez años, pero cuando se desató la guerra regresó a su viejo regimiento. Al avanzar a un ataque se torció el tobillo. Sin embargo consiguió un palo de una silla de una cabaña cercana y continuó cojeando al frente de sus hombres, sentándose cuando hacían una parada y dirigiendo las operaciones desde su silla. Continuó haciendo esto hasta que fue malherido, pudieron sacarlo a salvo aun sentado en su silla.

CÓMO VIVIR MUCHO

Supongo que ninguno de ustedes los Scouts que están leyendo esto son colegas felices y dichosos (¡No lo creo!). Pero si quieren llegar a vivir hasta los 100 años, hay una manera de hacerlo, escrito por una persona que lo ha hecho: "Sé feliz y trabaja duro".

Es lo que la señora Rebeca Clark, de High Road, Wood Green, dijo unos días antes de morir; tenía 100 años, y ella debió saberlo.

Pienso que la mayoría de los Scouts están haciendo exactamente lo que se recomienda, así que en el año 2,010 habrá 200 mil viejos colegas de más de 100 años de edad, brincando en rodillas raídas y sombreros desgastados, cantando "¡Muchachos, estén preparados!".

LA ÚNICA COSA MALA

La señora Scoresby Routledge, una muy conocida dama Scout, me escribió diciéndome que mientras viajaba en el Pacífico se encontró con Scouts en toda clase de sitios inesperados.

Después de dar una buena referencia de ellos, añadió que la única cosa mala de los Scouts es que silban.

Ella señaló que una gran cantidad de personas ya sufren del ruido de las calles en nuestras ciudades, especialmente las personas que están enfermas o débiles. Aun los ruidos pequeños e inofensivos "irritan los nervios", y no les permiten descansar. Silbar es uno de estos ruidos tan temidos.

Espero que los Scouts, cuando vayan por las calles, piensen en esto y silben en un tono más bajo, como una buena obra a las personas que les pueda molestar.

Al mismo tiempo, no necesito recordarles que es bueno silbar y sonreír ante una dificultad, cuando de otra manera se echarían a maldecir, o a gritar de dolor o de pánico, o a pelear con los puños (o con patadas), de acuerdo con lo que les estuviera sucediendo.

He conocido colegas que silbaron durante tiempos muy malos, durante la acción y sus silbidos no sólo los mantuvieron a ellos en calma, también a aquellos a su alrededor los hizo sentirse calmados y contentos.

UNA ANTIGUA INSCRIPCIÓN

En Timgad, Algeria, hay unas ruinas interesantes, entre ellas están las de un teatro y de unos baños.

El teatro es enorme, al aire libre, de forma de herradura y con asientos de piedra subiendo como escalones uno arriba del otro y, en la parte superior, una fila de palcos privados.

El escenario es muy bello, está construido de piedra, con bellas columnas de mármol y con una pared de respaldo, pues los romanos no hacían uso de decoraciones pintadas como nosotros; detrás del escenario estaban los camerinos para los actores.

El teatro en sí era lo suficiente grande para sentar a 3,400 espectadores, más de lo que la mayoría de los teatros en Londres pueden hacer y como Timgad es sólo una ciudad de provincia no muy grande, se demuestra que los romanos eran tan aficionados a las obras de teatro como los ingleses de hoy en día lo son a las películas.

Eran igualmente aficionados a los baños, en esta ciudad nada más, había doce baños públicos. Eran lo que llamamos baños turcos, esto es, había cuartos de baño de diferentes grados de calor por los que había que pasar de uno templado, tibio o muy caliente, a otro más fresco y frío, a los romanos les gustaba mucho tomar estos baños a diario.

Esto es demasiado de una cosa buena, pues es capaz de debilitar a un hombre. Como ustedes saben, los romanos fueron arrojados de su Imperio, porque se permitieron ser débiles de cuerpo y alma por pereza al ir demasiado al teatro y por continuos baños calientes.

Un habitante de Timgad escribió en una piedra lo que pensó era la mejor forma de ser feliz:

"Cazar, bañarse y reír, es la manera de vivir".

Hay mucho de verdad en lo que él dice, pues para cazar se tiene que usar mucho de conocimiento de los bosques y ejercicio fuerte, y el mantenerse limpio y ser feliz, todo es parte de la vida Scout.

Pero se le olvidó mencionar una cosa muy importante tocante al hacer de su vida una vida feliz, y espero que cualquier Scout me pueda decir de inmediato cuál es ese punto, ¿puedes tú hacerlo?

Se olvidó de la felicidad que da el hacer una buena obra. Si hubiera alterado su oración y la hubiera puesto así:

"Ser Scout, bañarse, hacer una buena obra, y sonreír, es la manera de vivir y ser feliz" habría dicho la verdad y hubiera descrito exactamente lo que hace cada Boy Scout.

NO TE PARES CON LA ESPALDA AL SOL

Éste es uno de los lemas Scouts.

Todos los Scouts saben que cuando se examinan pisadas en el suelo, generalmente se tiene que hacer de frente al sol, hay que tenerlas entre el sol y ustedes, así las verán mejor.

Pero ése no es el significado de este texto; tiene un segundo y más grande significado.

Significa que cuando hay una posibilidad de luz de sol o de brillantez, búsquenla cuando estén con aflicciones o infortunios y saquen lo más posible de ella.

Si se sienten inclinados a quejarse de su suerte porque se dañaron una pierna y no pueden jugar en un partido de fútbol, piensen en esos pobres lisiados que nunca han podido jugar.

Aun con la peor suerte que tengan, recuerden que hay un fondo de luz atrás de cada nube. Hay algún brillo en alguna parte, si tan sólo lo encuentran, no le vuelvan la espalda.

Cuando la cosas parecen estar de lo peor y todos están deprimidos, háganse a la idea que, a cualquier costo, estarán llenos de esperanza.

Traten de ver hacia dónde hay esperanza.

Recuerden que San Pablo dijo que Dios era el "Dios de Esperanza"

La esperanza les da ánimo y comodidad en los malos tiempos, su esperanza reconfortará a otros a su alrededor y les dará ánimo para seguir.

LORD ROBERTS

Lord Roberts tuvo la mejor muerte que se hubiera podido esperar para él. Murió en el campo de batalla, con el sonido de las armas, cumpliendo con su deber por su país a la edad de ochenta y dos años.

Lo conocí hace muchos años. Fue en Simla en la India. Acababa de enlistarme en la Armada, y en un baile estaba disfrutando toda la gloria de mi nuevo uniforme. Había ido al cuarto de los refrigerios para traer algo para mi pareja, pero no podía hacer que entendiera el sirviente nativo lo que yo deseaba, pues en ese entonces no había aprendido nada de Indostano.

Un oficial muy pequeño pero muy cortés junto a mí, bondadosamente le explicó al sirviente lo que yo quería. Entonces él dijo que si yo quería disfrutar de la India debía aprender el idioma lo más pronto posible, si podía hablar con los nativos disfrutaría más el país. Me preguntó mi nombre y dónde me estaba quedando.

Después de agradecerle, no pensé acerca de esto hasta el siguiente día, cuando llegó a mi casa un profesor nativo de idiomas, quien me dijo que Sir Frederick Roberts lo había enviado ¡a darme unas lecciones!.

Así que, como todos los demás, empecé mi conocimiento de él al agradarme sinceramente. Él se había salido de su rutina para ser bondadoso con un joven oficial del cual no sabía nada. Pero así era él.

No necesito contarles de los inicios de su carrera en la Armada. Probablemente todos los Scouts saben cómo, en el motín en la India en 1858, el Teniente Roberts ganó la Cruz Victoria. Había atacado con la caballería y seguido a los amotinados que huían, cuando vio a uno de ellos atacar a un nativo leal hombre de caballería.

De inmediato Roberts se lanzó a su rescate y cortó (cercenó) al soldado indio (Sepoy).

Al estar haciendo esto, vio a dos Sepoys más huir con una bandera de regimiento, así que fue tras ellos, aunque sin ayuda y solo. Se apoderó del Estandarte y cercenó al hombre que lo tenía. El otro hombre con su rifle apuntó frente de él y jaló el gatillo, pero el arma falló, por lo que el hombre se dio la vuelta y huyó para salvar su vida.

En 1880 Lord Roberts hizo su famosa marcha en Afganistán, desde Kabul para liberar Kandahar, que había sido sitiada por los afganos. Llevó 10 mil hombres y marchó las 320 millas en 22 días, que fue una excelente hazaña en ese difícil desierto montañoso. Llegó a tiempo para liberar Kandahar y para infligir una derrota muy importante a los afganos. Por su espléndida victoria aquí, recibió el título de Lord Roberts de "Kandahar".

En 1,900 fue Comandante en Jefe de las fuerzas Británicas en la guerra de Boer en Sudáfrica. Aquí, una vez más hizo gala de determinación y autosacrificio.

Al ganar la Cruz Victoria mostró que, aunque era un hombre muy pequeño -casi fue rechazado por la Armada por ser de tan corta estatura- tenía gran valor. Y también tenía un gran corazón.

Su valor y autocontrol tal vez se comprobaron mejor al forzarse él mismo a mandar hombres a su muerte en las batallas, aun cuando los amaba y gustosamente los hubiera salvado, de no ser si el deber y el bien de su país no estuvieran en riesgo. Fue en Sudáfrica donde se encontró con la desgracia de su vida, cuando su único hijo fue muerto al tratar de salvar las armas en la batalla de Colenso.

Por su valentía en esta ocasión, el joven Roberts fue premiado con la Cruz Victoria, aunque ya estaba muerto. En muy pocas ocasiones la Cruz Victoria ha sido ganada por ambos, padre e hijo.

Una vez más en Sudáfrica Lord Roberts tuvo un acto generoso hacia mí al cabalgar muchas millas para encontrarme en mi venida a Pretoria después del sitio de Mafeking.

A su regreso a Inglaterra después de la guerra, Lord Roberts se convirtió de Comandante en Jefe de la Armada Británica.

Cuando empezó el movimiento de los Boy Scouts, tomó gran interés en él pues estaba muy orgulloso de los chicos y sabía qué tan útiles podrían ser a su país si tan sólo estuvieran entrenados.

Así que llegó a ser Consejero de las Oficinas Principales de los Scouts y pasó revista a los Scouts en un desfile mayor en Hyde Park el Día del Imperio.

Cuando fui a quedarme con él, hablaba de pocas cosas fuera de los Scouts y de los Scouts en Ascot, que fueron fundados y organizados por su hija Lady Aileen Roberts, la cual era gran amiga de los Scouts.

Los Scouts de Ascot formaron parte de la Guardia de Honor que escoltó su cuerpo por ese lugar hacia el sitio donde sería enterrado. En la Catedral de San Pablo, me alegré de ver también una Guardia de Honor de Scouts que habían venido a dar sus últimos respetos a nuestro héroe nacional.

Lord Roberts fue un ejemplo espléndido a seguir por cualquier muchacho, ya que se levantó desde orígenes muy bajos hasta el más alto puesto en la Armada, lo que es más, en el puesto más alto en la admiración y afecto de todos sus camaradas vasallos del Rey, ya sea que fueran blancos o de color. Y consiguió todo por mérito propio, aunque como un mozalbete no fue extraordinariamente brillante o inteligente.

¿Cómo lo consiguió?

Bueno, cuando ustedes lean esto, verán que al hacer estas cosas en su vida diaria Lord Roberts estaba cumpliendo exactamente con la Ley Scout. Esto es lo que ustedes como Scouts están ya pretendiendo hacer.

Así que, ahora que tienen su gran ejemplo ante ustedes todo lo que tienen que hacer es seguir adelante y apegarse a él, con toda la gran determinación que sean capaces, como Lord Roberts, para ser un compañero feliz y valiente y un hombre de valor para su país.

Anterior
Anterior

Biblioteca
Biblio

Indice
Indice

Homepage de Siempre Scout
Home

Arriba
Arriba
Siguiente
Siguiente